Nutriéndo el vacío místico con letras de fuentes gloriosas
Sé que últimamente no he hecho más que citar textos de otros autores, creo que la razón es que el poeta que una vez creí haber cautivado me ha abandonado. Sóla de nuevo en las tinieblas, tengo el corazón destrozado, el alma demasíado vacía como para escribir. Porque no se puede escribir con el alma vacía, siempre debe estar colmada de algo... algún sentimiento, alguna angustia... incluso de algún fantasma. Pero no tengo nada... ahora tengo las manos vaciadas, las letras no fluirán de la nada. Cuando pueda ubicar algún sentimiento, volveré a escribir. Lo prometo. SONATINA La princesa está triste... ¿Qué tendrá la princesa? Los suspiros se escapan de su boca de fresa, que ha perdido la risa, que ha perdido el color. La princesa está pálida en su silla de oro, está mudo el teclado de su clave sonoro, y en un vaso, olvidada, se desmaya una flor. El jardín puebla el triunfo de los pavos reales. Parlanchina, la dueña dice cosas banales, y vestido de rojo piruetea el bufón. La princesa no ríe