Pesadilla americana
Leyendo una novela de Bret Easton Ellis, Lunar Park , me sacudió una ilustre descripción de la paranoia estadounidense. El opio del sueño américano fue manifestado con tal perfección, que la realidad parcía una película independediente donde el terror sólo se experimenta frente a una pantalla grande; no en la vida real. Pues Easton Ellis narró a la viva imagen el desmonoramiento de la inmaculdad vida de los suburbios en los Estados Unidos. Por allá lo llamarían "sacar los esqueletos del closet". Más que esqueletos, fantasmas, espíritus oscuros que persiguen los temores de aquellos habitantes de casitas color pastel incapaces de tomar algún riesgo protegidos dentro del cascarón de un muro de seguridad bajo las alas del águila calva. La vida en tal ambiente tan monótono no debería sorprender a la sociedad de que los jóvenes crezcan dañados. Autodestruídos. "Esta pesadilla despierto no duraba má de treinta segundos, se reproducía a un montaje rápido que no obstante exigía ...