Magic time... or not?
Hpy encontré una torre sólida de libros cons instruciones para hacer trucos de magia. Eran rindículamente grandes y estúpidamente flacos.
Mi madre me dijo que desde pequeña siempre me han gustado los magos. Pero yo sólo recuerdo que me volví obsesiva cuando vi un programa de TV hace algunos años con dos ilusionistas haciendo trucos por las calles de ciudades...sí, Criss Angel no es nada original.
Al principio me gustaba Mindfreak... pero lo odié cuando a todo el mundo también lo comenzó a amar. Entonces entendí que el afeminado fisioculturista sólo mercantilizaba el "Ooooooooooohhhhhhhhh!!!" de los infelices que estuviran pasando por esa acera en el momento que él se les atravesara con una cámara de televisión. Y como les gusta a esos gringos aparecer por televisión.
Miren mi megalomanía, mis músculos bronceados y mi manicura, porque trato muy fuerte de ser badass mientras uso camiseta señidas. No me da envidia que Criss Angel camine por las paredes de los edificios... en realidad, no creo que eso me sea muy útil y no me gusta llamar ese tipo de atención.
Abrí el libro con la esperanza de aprender algún truco que, obviamente, nunca le enseñaría a nadie. Pero las instrucciones eran más complicadas que tratar de leer un menú en chino al revés.
Y pensé... no me importa aprender cómo se hacen los trucos. Sólo me gusta ver a los magos e ilusionistas hacer lo suyo y permitirme soñar concientemente mientras dura el espectáculo. Porque durante unos pocos instantes un simple truo de cartas te da la licencia de creer que el mundo es un poquito especial y que la magia existe (aunque sepas que es mentira).
Quiero sólo observar a los magos flotar y partirse por la mitad, porque yonunca preguntaré "¿Cómo hiiste eso?"... porque no me interesa.
Engáñenme, lo disfrutaré, me convenceré que es verdad, y luego lo olvidaré. Y eso me dará algunos momentos de felicidad.
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