No sé cómo seguir esta rutina, cada vez que me levanto de la cama siento que me ahogo. Salir y enfrentar este mundo me da cada vez más ganas de escapar cambiar mi nombre y comenzar de nuevo, sin un pasado y sin viejas preocupaciones. No sé con certeza qué es lo que me mantiene dentro de esta desidia y esta molesta, leve y constante depresión. Sólo quisiera dormir; pero ya no puedo...
Sé que no debo dejar a un lado mis responsabilidades, es solo que ya no quiero ningún peso sobre mis hombros, nada de lo que hago me motiva, nada de lo que solía hacer que tanto me apasionaba me da un empujón para continuar. Sólo pienso en escapar, sé que no puedo... soy demasiado cobarde como para escapar; pero cada vez estoy menos interesada en seguir intentándolo.
Casi nada de lo que pasa me importa. Busco confort en la comida, y eso parece ser lo único bueno que hago: comer. Ni siquiera tengo espacio para sentirme miserable, quisiera gritar; pero no puedo. Ya no quiero seguir pretendiendo... a pesar de que sea una gorda patética.
No sé qué hacer para que todo esto termine.
Aún no quiero llorar.

Comentarios

MARY ha dicho que…
Tu no eres una gorda patetica, eres la persona más fascinante y maravillosa que he conocido gracias a Blogger. Conque animo mi preciosa Karmina Burana.
Saludos!!!!